martes, 31 de marzo de 2015

El útero de Susanita....

Estamos por cumplir los tres meses de la nueva gestión municipal a cargo del alcalde electo por mayoría popular (duela a quien le duela....) Luis Castañeda Lossio..., y la ola de ataques de los "defensores" de la gestión anterior no han cesado desde las redes sociales, en especial desde dos vitrinas pro-caviar totalmente parcializadas como son el Útero de Marita (quienes me han bloqueado para evitar el debate) y Voto Vigilante. Personalmente, no soy partidario o defensor de Castañeda, pero soy de las personas que creen que en la política es mejor servir de apoyo que de estorbo, y no es correcto destilar odio porque "tu candidato perdió en las elecciones"o tratar de "sabotear la gestión" como lo están haciendo los cibernautas con "corazoncito verde". Trataré de ser imparcial, y aclarar algunos puntos en relación al inicio de esta nueva gestión, siendo lo más constructivo posible:

1. Ordenamiento del parque de las aguas: Ni bien empezó la gestión, el alcalde Castañeda se dedicó de lleno a recuperar la imagen "venida  a menos" de su emblemática obra, la cual estaba lleno de "paneles con tinte político", y en un mal estado de conservación, producido básicamente por los frecuentes eventos que en él se realizaban, así como por el poco control del personal que laboraba allí para evitar que las personas se echen en el pasto o arrojen basura. Eso se lo puedo asegurar por experiencia propia, pues vivo cerca de ese parque, y en estos meses he notado un cambio notorio en su cuidado y presentación. 
Imagen tomada de espacio360.pe

2. Eliminación de los murales en el centro histórico. Insistir en defender los murales que la anterior gestión "solventó" con el dinero de sus arcas es como dispararse a los pies en su intento de beneficiar la imagen de la ex alcaldesa. En primer lugar, porque durante su gestión no hizo una buena campaña de difusión de los mismos, a tal punto, que para la mayoría de ciudadanos de Lima Metropolitana, esos "murales" no pasaron de ser simples "graffitis" que no entonaban con la tradicional calle limeña. En segundo lugar, porque en su afán de modernizar Lima y quedar bien con ciertos "artistas", uno de ellos vinculado al MOVADEF, la ex alcaldesa pasó por alto que esa inversión no era prioritaria ante tantos problemas que aquejan a la ciudadanía. Por eso, salvo un grupo de cibernautas y defensores acérrimos del partido verde, la mayoría de la población no extraña la eliminación de esas "obras de arte".
Imagen tomada de capital.com.pe
3. Cancelación del proyecto Río Verde. La gestión de susana Villarán pasará a la historia como la más "burocrática" e "imaginaria" de la historia. Ninguna de los grandes proyectos que ella anunció dieron siquiera el primer paso para que la nueva gestión pudiera continuar. El proyecto Río Verde, que fue vendido a la población como una superinversión moderna y ecológica que elevaría el atractivo turístico de Lima Metropolitana al nivel de las grandes ciudades europeas nunca pasó de ser una maqueta por "X" razones. Sería bueno que los defensores de la gestión anterior informen cuantos "millones de soles" se invirtieron en los estudios para la realización de dicho proyecto y cuanto tiempo demoraron en hacerlo, para tener una idea de la eficiencia del personal que fue contratado para esa labor, y entender de paso, el por qué no se pudo empezar esa obra durante la gestión de la ex alcaldesa. 

Imagen tomada de forosperu.net
4. Cancelación de la Reforma del Transporte. La idea de disminuir el número de líneas que circulan en Lima no es mala en sí. Lamentablemente la gestión anterior buscó el mecanismo sencillo para hacerlo, haciendo licitaciones especiales en favor de ciertas empresas (que supuestamente cumplían ciertos estándares de calidad) para monopolizar las principales rutas de transporte en la capital, y obligar a las demás líneas sin licitación a adecuarse a nuevas rutas menos ventajosas para sus intereses (algo que obviamente no les agradaba a dichas empresas). Encima, los usuarios tendrían que verse obligados a hacer largas colas y trasbordo para hacer el recorrido que antes hacían con un sólo bus, perdiendo no sólo tiempo, sino dinero. El apresuramiento de la ex alcaldesa o la ineficiencia del personal encargado de dicha "reforma", generaron en la población una desaprobación terrible (tal vez la principal responsable de que Castañeda gane las últimas elecciones), a tal punto, que muchos han dado un respiro de alivio al enterarse que la "reforma del transporte" ya no continuará.

Imagen tomada de peru21.pe
5. Lucho lo hizo? o Lima lo hizo?. No es un delito que un alcalde u otra autoridad a nivel nacional ponga su nombre en la obra que inaugura. Pero los "susanitos", quien en este caso si parece ya un "berrinche", exigen que el alcalde no ponga su nombre sino que ponga al estilo Susana, la frase "Lima lo hizo...". Los rumores políticos dicen que esa frase no fue creada por "humildad" de la gestión de Villarán como pretenden hacernos creer, sino para evitar que los "trolls" de Castañeda la ataquen cuando inaugurara obras que Castañeda había iniciado en su gestión anterior o parecidas, como en el caso de las escaleras en los cerros, las cuales en vez de amarillo las pintó de verde para diferenciarse (y ahí nadie decía que era campaña política, ¿verdad?).

6. Retiro de la bandera con los colores del arco iris de la Municipalidad. La gestión de Villarán fue abiertamente pro-gay, y es conocido (aunque muchos seguramente no lo saben) que ella financió a través de la municipalidad (tal como afirmó Rafael Rey en un programa de cable años atrás) la realización de numerosos eventos para esa comunidad (matrimonios simbólicos, conferencias y talleres, etc), llegado incluso a desfilar en algunas marchas del orgullo gay en compañía de algunos regidores suyos. Seguro que este dato no lo menciona el Útero de Marita o Voto Vigilante, pero en fin. A tal punto llegó su apoyo que en muchas ceremonias y a veces sin necesidad de ella, se veía flamear al lado de la bandera peruana la bandera "gay" con el pretexto de que es la bandera del "Tahuantinsuyo", a pesar de que los historiadores han afirmado que el imperio incaico nunca ha tenido bandera (la célebre historiadora Rostworowski lo ha negado tajantemente...).

Imagen tomada de larepublica.pe
En un próximo post analizaremos más la gestión del actual alcalde.

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